De niño, Dani soñaba con ser inventor y construir sus propios juguetes. Actualmente, diseña, fabrica y da vida a efectos de magia. Dani entró en el mundo de la magia a los 13 años y desde entonces, se ha formado en diversos campos a través de seminarios, congresos de magia, escuelas y talleres de teatro. Su objetivo es combinar la magia con otras artes escénicas, ya que en el escenario, los límites los pone uno mismo. En el año 2008, Dani y su compañero y amigo, el mago Marttyn Andersen, dieron vida a Symbiosis Producciones, una empresa destinada a dar una nueva dimensión a sus proyectos tanto individualmente como en conjunto. Además, Dani realiza trabajos por encargo y colabora con diversas compañías de teatro en aspectos tan dispares como la actuación o el diseño de efectos especiales a medida. Las ganas de mejorar y ampliar su formación llevaron a Dani a cruzar el charco, y ahora su carrera se mueve entre España y Estados Unidos.