Su faceta más teatral se despierta gracias a Fernando Lalana el cual según sus palabras «fue el culpable de que se metiera a titiritero» Durante estos años ha colaborado con grupos como la PAI, Caleidoscopio, Pingaliraina… y fundado el grupo de animación Les Rubitos. En lo referente a su introducción al mundo de la magia, las causas pueden ser múltiples: el ser hijo único (y que su amigo imaginario no le hiciera caso) , la colección de «El mundo mágico de Tamariz» que adquirió por fascículos…o su destacada habilidad dactilar…. A día de hoy, Pepín se presenta como artista completo en un espectáculo donde la comicidad, la complicidad con el público, la música, la interpretación, la magia y la sorpresa se dan la mano en un espectáculo único que recoge todo lo aprendido a lo largo de una ya dilatada vida profesional.